
Cómo limpiar el acero inoxidable
Si limpiamos el acero inoxidable de forma regular no deberíamos tener problema en limpiarlo con un jabón común o un producto de limpieza específico para este material. Sin embargo, si llevamos tiempo sin limpiarlo y la suciedad está muy adherida, os dejamos un pequeño truco.
Necesitaremos:
– trapo
-cenizas
-aceite
– alcohol
Lo de las cenizas os resultará curioso pero sirve para desincrustar la suciedad sin llegar a rayar el acero inoxidable. Comenzamos haciendo una mezcla de las cenizas y el aceite de oliva, mojamos el trapo con la mezcla y pulimos la pieza de acero inoxidable. Frotamos muy fuerte y hasta que veamos que se ha quedado sin restos de suciedad, puede que os lleve un rato. Mojamos otro trapo con un chorro de alcohol, y frotamos nuevamente la pieza. De esta manera quitaremos los restos de ceniza y aceite, además le daremos brillo. Un truco extra para todos vuestros utensilios o piezas de acero inoxidable es frotarlas con un trapo impregnado en zumo de limón.
Otro caso muy usual en las casa son las piezas de acero inoxidable como cazuelas que se queman. Os aconsejamos que no las tiréis, ya que tiene solución.
Necesitaréis:
-Bicarbonato –
Colca cola –
Detergente –
Esponja
Primero haz una mezcla a partes iguales de agua y bicarbonato, aplícala al objeto quemado y déjalo reposar durante 15 minutos. Lávalo con agua tibia y detergente. Otro truco es hervir durante 10 minutos una coca cola. Luego lo limpias con agua y detergente, y lo tienes listo.